El Consejo de Administración es responsable de la estrategia de la organización y de supervisar la actuación del órgano de dirección de la empresa. Ofrece directrices generales inherentes al negocio, además de analizar los informes corporativos.

El principal objetivo del Consejo es maximizar el rendimiento de las inversiones. Para ello, se encarga del desarrollo de cuestiones estratégicas, como la búsqueda de nuevos negocios o la creación de ventajas competitivas duraderas.

En una empresa familiar, la armonía y la cohesión corporativas sólo son posibles si existen reglas y criterios que concilien los intereses y las expectativas de socios y herederos. Para definir estas reglas y criterios, es indispensable un proceso de redacción conjunta y legítima del Acuerdo de Socios. Dicho instrumento deberá reflejar fielmente las voluntades de los socios y los intereses reales de la sociedad.